Un adolescente fue asaltado y golpeado en El Trapiche, identificó a los atacantes, pero la Policía los requisó y los liberó

A un adolescente de 16 años le tocó atravesar una experiencia traumática durante el Día del Estudiante en El Trapiche cuando al menos cinco jóvenes mayores de edad lo amenazaron, golpearon y le quitaron su celular.

El menor esa noche concurrió a una fiesta organizada por una promo y alrededor de las 5:30 decidió regresar a la cabaña, fue en ese momento donde los asaltantes simularon estar armados para intimidar y robar sus pertenencias.

“Mi hijo fue solo dos días a la casa de una compañera que estaba al cuidado del padre. Esa noche volvieron separados con los amigos y a la mitad del camino lo increpan y le dicen ‘dame el celular’ entonces mi hijo les dice ‘espérame que tengo dinero’ y cuando lo va a sacar lo empujan y lo hacen caer al piso”, contó Laura Belzunce en diálogo con El Chorrillero.

Ante la resistencia de no querer entregar su teléfono, lo que siguió fueron golpes en simultáneo de todos los atacantes. Una vez que los ladrones cumplieron con su objetivo corrieron a esconderse a una casa abandonada.

“Salió desesperado pidiendo ayuda, unos chicos le señalaron que la Policía estaba a la vuelta y se dirigió hacía el puesto. Les comentó todo lo ocurrido y les explicó que vio cuando ingresaron a la vivienda y los efectivos entraron, pero no encontraron a nadie”, relató.

La madre mencionó que mientras su hijo seguía hablando con los efectivos se comenzó a acercar gente y entre ellos, estaban dos de las personas que habían cometido el delito.

“Reconoce a dos de los atacantes entre el grupo que tiene alrededor, les dice a los policías que eran ellos, le hacen una requisa superficial y como no le encuentran nada, los dejan ir”, señaló.

Laura reconoció que le fue sumamente llamativo que no les tomaron los datos a los delincuentes y tampoco a su hijo: “No le ofrecieron asistencia médica, no llamaron a ningún adulto, no le preguntaron qué edad tenía y no llamaron a los padres”.

“Mi hijo les preguntó a los efectivos porque estaba muerto del susto y aún era de noche, si lo podían acompañar a la casa, pero le dijeron que no porque no debían abandonar su puesto de trabajo”, indicó.

Y cuestionó: “Me da muchísima rabia porque eran dos efectivos claramente actuaron mal en todos los sentidos”.

Al enterarse del hecho viajó a El Trapiche y se acercó a la comisaría para radicar la denuncia: “Me sentí muy decepcionada porque pareció que nosotros éramos los culpables. Hoy me presenté en la Fiscalía en donde me comunicaron que la denuncia no estaba cargada correctamente y recién ahora se pusieron a trabajar”.

“Por suerte ya lo vio la médica forense, le hice una ecografía por mi cuenta, y mi hijo está fuera de peligro. Lo peor fue el susto, y la angustia de pensar que podría haber pasado lo peor”, aseguró.

En este contexto, expuso una vez más su bronca: “Con todas las publicaciones del Gobierno alardeando que ‘estamos para servirte’ y todo lo que dijeron del despliegue policial, realmente no sirvieron de ayuda y esa es mi bronca”.

“Además, esa noche habían salido colectivos gratis para el recital de música que estaba organizado entonces había mucha gente y no eran estudiantes, era una mezcla donde además los chicos saben que corre la droga, conocido todo vale avalado por el Estado”, concluyó.